miércoles, 11 de julio de 2012

LECCION ESCUELA DOMINICAL DOMINGO 15 DE JULIO DEL 2012

“El primer anuncio de su muerte”
Lección: Mateo 16:21-28
Texto: Marco 8:31
Domingo: 15 de Julio del 2012

INTRODUCCIÓN: Jesús comienza a conversarles a sus discípulos, sobre el real propósito de su venida, sus padecimientos, su muerte y su resurrección. Pero, lamentablemente no entendieron las palabras del maestro y aunque le reconocieron como el “Mesías”, ellos no relacionan las palabras proféticas de Daniel (9:26) o del mismo profeta Isaías (53), que hablaron tocante al “Mesías” y a su muerte.

DESARROLLO: “Desde entonces”, viene a marcar el “inicio del final”, y Jesús comienza a declararles abiertamente las cosas que sucederán. Sería Jerusalén, la capital, la ciudad santa, donde estaba el templo y se hacían los sacrificios, allí debía morir. Su martirio no fue sorpresa para Él.
Los ancianos, los principales sacerdotes y los escribas…” serían los que le castigarían y le quitarían la vida. Que pena que los más instruidos, los más preparados, los que debieron haberle conocido y adorado, son los más grandes enemigos.

Aunque las descripciones del sufrimiento, de la violencia, del dolor y de la muerte, provocan pena y angustia, Jesús nos expone sobre el final de todo ello indicando su resurrección, que es la victoria completa de su misión (consumado es), la consolidación del plan de salvación y la manifestación gloriosa de su poder resucitando de entre los muertos, como dice el apóstol Pedro, “por cuanto era imposible que fuese retenido por ella” (Hch. 2:24b).

“En ninguna manera te acontezca esto”…
Su cercanía con el maestro, motivó a Pedro en protegerlo de este sufrimiento, pero indudablemente la mayor motivación para “reconvenirle” fue por estar siendo usado como instrumento de “Satanás”.
Que variables somos, en un momento somos “bienaventurados” y luego “adversarios”, y nosotros no somos mejores que Pedro… ¡Dios nos ayude!

Cristo ha expuesto a sus discípulos sobre sus sufrimientos, pero ahora les conversa lo que ellos también han de padecer. “Tome su cruz”… expresión conocida por sus discípulos, ya que la crucifixión era un método romano de ejecución conocido, ya que los condenados llevaban la cruz por medio de la ciudad hasta el lugar de le ejecución. Seguir a Jesús era sinónimo de entrega total y el discípulo sigue a Cristo, como la oveja a su pastor,

CONCLUSIÓN: Aunque el seguir a Cristo es una decisión voluntaria… “si alguno quiere…”, no está exenta de riesgos, y de valor, especialmente cuando tiene que “negarse a si mismo”, dejar todo tipo de egocentrismo, autosuficiencia y mayormente de “autonomía”, para seguirle a Él.
Toda la eternidad depende de esta resolución, “salvar la vida temporalmente” y renunciar a Cristo, perderá la “VIDA ETERNA”, y será lanzado a la muerte segunda a un infierno eterno. Pero, el que pierde la vida temporal por la causa de Cristo la recobrará glorificada, transformada para una para la eternidad.
La historia nos recuerda que muchos tomaron la decisión de “seguir a Cristo”, y tuvieron que rendir sus vidas en la hoguera, en el martirio, en muertes horrendas, pero, muchos llegaron a esta instancia con una sonrisa de esperanza y otros cantando himnos de gloria.

La gran esperanza del creyente, del que sigue a Cristo, es que ´Él volverá en gloria y con retribución, por lo cual, nos animamos a estar firmes y darlo todo por su causa.