martes, 7 de septiembre de 2010

LECCION DOMINGO 12 DE SEPTIEMBRE DEL 2010


Cristo vuelve cumplamos nuestros deberes
Lección: 1 Pedro 5: 1 - 7
Texto: Jeremías 23: 4
Domingo 12 de Septiembre de 2010

Introducción:

Era honra particular de Pedro y de unos pocos, el ser testigo de los sufrimientos de Cristo; pero es privilegio de todo verdadero creyente participar de la gloria que ha de ser revelada.


Los cristianos pobres, dispersos y sufridos, son la grey de Dios, redimidos para Dios por el gran Pastor, y viven en santo amor y comunión, conforme a la voluntad de Dios.


También se nos dignifica con el título de “heredad de Dios o sacerdocio de Dios”.


Cristo es el Príncipe de los pastores de toda la grey y heredad de Dios. Todos los ministros fieles recibirán una corona inmarcesible de gloria, infinitamente mejor y más honrosa que toda la autoridad, riqueza y placer del mundo.

Desarrollo:

“Los deberes de los ancianos” v. 1- 4
v. 1, 2. Los ancianos (pastores) son exhortados a cuidar del pueblo de Dios, asumiendo la responsabilidad de vigilar la grey (que es el cuerpo de creyentes), voluntariamente no por compulsión (pasión vehemente y contumaz).

Con ansias pero sin motivaciones de ganancias personal. El verdadero pastor no gana almas para lucrarse y construir su propio imperio. Sino que está trabajando para el reino de Cristo. Porque “El obrero es digno de su salario”. (Lc. 10: 7).

v. 3. Deben demostrar que son ejemplos a seguir, y no por fuerza autocrática (Persona que ejerce por sí sola la autoridad suprema) sobre los que han sido puestos bajo su cuidado, pongamos atención dice bajo su cuidado, lo que no lleva a entender que no le pertenecen sino que son de uno mayor.

v. 4. La recompensa para el fiel pastoreo será una corona incorruptible de gloria. Todos los galardones que recibimos aquí tienen un tiempo marcado de vida y esplendor, pero aquel galardón, nunca perderá su valor ni su brillo, porque no se corrompe, será el lugar perfecto donde la corrupción no tendrá entrada y todo permanecerá por la eternidad sin fin ¡Gloria a Dios!
Por eso cuidemos la grey de Dios porque el príncipe de los pastores aparecerá para buscar a los suyos (2 Co. 5: 10)

v. 5 Los deberes de los jóvenes:
Los jóvenes deben estar sujetos a los ancianos (autoridades puestas por Dios) y la humildad debe ser el ropaje usado en las relacione de unos para con otros (Pr. 3: 34).
El éxito de nuestra vida en la iglesia, que es el cuerpo de Cristo, depende fundamentalmente de la capacidad de sumisión que apliquemos en nuestro andar diario, si logramos entender que toda autoridad esta puesta por Dios. (Ro. 13: 1) nada nos podrá apartar de “vivir los hermanos juntos y en armonía”.

v. 6, 7 El desarrollo de la madurez
La madurez cristiana se desarrolla en la medida que la sumisión toma posesión de nuestro carácter. Todo lo que pueda hacer crecer Cristo en un creyente, un carácter insumiso lo destruirá de una certera estocada.

Cada vez que resisto al diablo permito a Dios que pueda trabajar en mi carácter y así someter mi determinación de vivir en independencia de Dios.

Esto operara en el creyente un carácter maduro para enfrentar las luchas diarias.(Stgo. 4: 7)


Conclusión:
Debe despertase en cada creyente un deseo ferviente por la excelencia en el servicio a Dios “A mayor luz, mayor responsabilidad”.


La humildad preserva la paz y el orden en todas las iglesias cristianas; el orgullo la perturba. Cuando Dios da gracia para ser humilde, también da sabiduría, fe y santidad. Ser humilde y someterse a Dios reconciliado, trae más consuelo que los deleites de la soberbia y la ambición.


Echemos toda nuestra ansiedad”, preocupaciones personales, angustias familiares, por la iglesia, echémoslo todo sobre Dios.


El remedio es echar nuestra solicitud sobre Dios, y dejar todo suceso a disposición de su gracia y su sabiduría. La creencia firme en que la voluntad y los consejos divinos son correctos calma el espíritu del hombre.
COMISION EE.DD.