Lección: Mateo 22: 34 - 40
Texto: Marcos 12: 29, 30
Domingo 23 de diciembre del 2012
INTRODUCCION: Nos hemos preocupado de llenarnos
de conocimiento, lo cual no es malo, pero lamentablemente se nos ha olvidado el
más grande de los mandamiento que no ha dado Dios el AMOR. Ahora no podemos
olvidar que los mandamientos no son optativos, por lo cual debemos esforzarnos
por amar con sinceridad y no solo en apariencia, y no seamos como los fariseos,
tentando a Dios con preguntas capciosas sabiendo lo que tenemos que
hacer..
DESARROLLO: Uno de
los fariseos, «experto en leyes» le pidió a Jesús que identificara la ley más
importante. Jesús citó Deut. 6.5 y Lev. 19.18. Al cumplir estos dos mandamientos, una persona cumplía
las restantes, ya que resumen los Diez Mandamientos y las otras leyes morales
del Antiguo Testamento.
Jesús dice que si amamos
a Dios y a nuestro prójimo por naturaleza guardamos los mandamientos. Esto es
mirar la ley de Dios de manera positiva. En vez de estar preocupándonos de lo
que no podemos hacer, debiéramos concentrarnos en aquello que sí podemos
hacer para mostrar que amamos a Dios y a los demás.
Para Jesús, el fundamento de la
relación con Dios y con el prójimo es el amor solidario. La integración de los
dos amores, de Dios y del prójimo, es su enseñanza fundamental. La Ley y los
Profetas son toda la Escritura, pues bien: el amor es la clave de la Escritura.
No se puede observar de verdad la Ley si falta el amor. Desde una perspectiva
cristiana, sin amor al prójimo no hay amor a Dios, no hay verdadero
cumplimiento de la voluntad de Dios.
El amor al prójimo no sustituye el
amor de Dios ni se identifica con él, pero es tan importante como amar a Dios.
Al colocar estos dos mandamientos como el eje de toda la Escritura, Jesús pone
en primer lugar la actitud filial con respecto a Dios y la solidaridad
interhumana como los fundamentos de toda vida religiosa.
CONCLUSION: Para concluir podríamos decir que
no hay una verdadera religión si la motivación no es el amor. Ya que la única
forma de conexión con Dios es a través del amor. No puedo jactarme de mi
religión o de mis conocimientos teológico si no unifico todo a través del amor
porque “Dios es amor y él no quiere la muerte del pecador” Y aquí podemos ver
que aunque todos nosotros somos pecadores el amor de Dios cubrió la multitud de
nuestros pecados…